sábado, 6 de junio de 2009

No se lo que quiero pero lo que quiero existe? Parte 3. Definiendo las peras que se le están pidiendo al olmo


Hasta aquí llego a un punto que es lugar común. Qué nació primero: los medios sin estándares musicales ni periodísticos o los programadores, locutores y conductores con escasa formación humanística o con estrechos gustos musicales. Y si no distingo a nadie y pongo en la bolsa a todos en un principio, los que se crean afuera de mi generalidad saben ellos mismos que están afuera y los que están adentro, bueno, ahora lo saben. 
 
Recuerdo a Jorge Lanata en una entrevista diciéndoles a jóvenes estudiantes de periodismo que en vez de meterse en una escuela de periodismo inicien una carrera humanística. Que la historia, la filosofía, las letras les darán mejores herramientas y que después tomen cursos o lean buenos libros sobre periodismo. Para el periodismo local, los dichos de Lanata, es buena tela para hacer una bolsa. Pasen adentro o queden afuera, es libre elección. Y doy fin acà a mis opiniones y comentarios sobre ellos. Tanto a los periodistas de la vieja escuela que hay que respetarlos porque se hicieron a golpes de remarla, y sobre los que pertenecen al grupo del recambio generacional que aun están a tiempo.

Volvamos a lo principal de estos 3 post últimos. Empecemos a definir lo que pedimos, que suenan a quimeras y utopías para las radios de èsta ciudad. Vamos a darle un toque dinámico. Antes de seguir leamos y escuchemos este tema. Escrito en 1979 por esa maquina de mirar que es Charly García. 



El fracaso de un amor que no hizo escuela, 
la ignorancia de una vida sin dejar. 
El desierto de una calle sin rayuela, 
nuestro cielo siempre estuvo más allá. 

Hoy que estás en penumbras 
la radio se escucha en un lugar. 
Tanta música absurda 
es mejor que comiences a hablar. 

Si en la música que escuchas no hay vida, 
si la letra ya no tiene inspiración. 
Si aunque aumentes el volumen ya no hay fuerza. 
Son los tiempos que están huecos de emoción. 

Hoy que estás en la nada, 
cierras tus sentidos y te das 
una larga mirada. 
Algo dentro tuyo va a sonar!


Desde que la escuché por primera vez por mediados de los ´80, me apropié de la vara con que midió Seru en el 79 a las frecuencias moduladas de aquel entonces. En la ciudad, a pesar de haber pasado algo grosso como la aparición de las FM´s, hoy esa vara me resulta muy útil y precisa.

Empecemos. La primera pera que se le pide al olmo es que las radios sean empresas. Con todo lo que eso implica en esponsabilidades, derechos etc, etc. Se sabe que las radios FM tienden a ser justamente empresas deficitarias, no rentables en la mayoría de los casos. Dejando afuera FM Ciudad, que es parte de un tradicional pool mediático, algunas son sostenidas por empresas madres relacionadas como complejos nocturnos de disco bares, hoteles, salones de fiestas, etc., y otras son sostenidas y financiadas por empresas no relacionadas que apoyan un emprendimiento de un familiar relacionado con la locución y perdiodismo. Las otras, la gran mayoría, son esfuerzos comerciales loables y aplaudibles pero que no mantienen una estructura profesional adecuada para una empresa mediática.

Las primeras con gran esfuerzo sostiene una estructura profesional de técnicos, periodistas y locutores. Las segundas tienden a prescindir de trabajadores o si los contratan son contratos pésimos en pago y beneficios.  Otras no pueden ni pagar nada, ni el tarjebus para el trasladdo.  Una empresa asi, ya compiten deslealmente con las que pagan todo. 

La segunda pera que se le pide al olmo es la definición de talk radio o music radio. Hoy por hoy, esta distinción entre radio tipo AM en FM o eminentemente musical pocas resisten tal clasificación en unas u otras. Las talk radios, las menos, no son completamente porque hay huecos en su programación que son llenados con playlist sin o escasa locución de piso. Y las que pretenden ser eminentemente musicales, tienen escasos programas que hablen de música, o que den novedades de música. Tienden a tener uno o dos programas de noticias y variedades, y en la gran mayoría no salen del esquema latino-80-90-alta rotación aunque algunas se abstienen de pasar latinos. Sus locutores suelen tener estilos parecidos entre radios, consignas similares y sólo se intenta retener al oyente. No hay una intención de satisfacer a melanómanos, frikis, adolescentes desencatados, adultos que desean no ser clásicos con info nueva de bandas nuevas, estilos, etc etc., que también es una forma de retener oyentes. En algunas radios, son playlist desde la PC, sin locución, en la mayor parte de su programación.

Una tercera pera pedida al olmo resulta ser la producción. Escapar de los playlist asi de una, sin dar ninguna información dejando al oyente solo con el tema. Desestimando el interés del oyente, e ir en contra del autor del tema que no lo publicitan adecuadamente, por mas que exista ese sistema que tiene algunos celulares. Ahora con internet y medios gráficos, el que tenga el interés de producir programas musicales tiene todo servido en bandeja. Y considerando que no todos tienen internet, y si la producción es buena, no seria poner al aire información redundante. Además, para los que poseen conexión a internet, es bueno llegar a casa y poner la radio para disfrutar música plácidamente desde el futón. Ser consumidor pasivo, mientras estén aún radios y televisión al aire, es una tentación saludable. 

Algunas de estas peras pedidas al olmo, si el olmo por esos milagros de la naturaleza, (como el hombre árbol, lo vieron por NAT GEO, ese si es un planta, tendría que revisar algunos piés de titulares de frecuencias por que no mueven la música) las entrega, distinta sería la radiofonía local. Con variedad, alternativas en la música o en información. Mas trabajo para locutores, periodistas, productores, publicistas y técnicos. La radio se mostraría mas profesional y anunciantes que antes no querián publicitar, lo harían en un esquema de mas calidad.

Son sólo sueños, quimeras, utopías que la cosa puede ser distinta en una ciudad como es Bahía, con los criterios de los titulares de radios y con el material humano que hay?. Cuestiones de poco mercado?, somos casi 400 mil y el segmento consumidor de música es el mas amplio. Consulten la estructura de la población de Bahía y verán cuantos entran en el segmento 13-30 años.

En un lejano post de Mayo hable que la convicción de hacer algo distinto es lo fundamental para cambiar. Pero “si seguimos al mas lento“ (esta frase es de un amigo), como suele pasar en todo ámbito local, me resigno a tener esta chatura de radios y televisón, y me dejo de hinchar las pelotas.

1 comentario:

Ernes dijo...

Esto e slo mejor de tu blog! marcás los defectos pero aportás soluciones! asi se hace amigo! un abrazo y felicitaciones! y no, no estamos tan lejos de hacer algo como la gente. Pero lamentablemente lo que nombrás que pasa en la ciudad tambien pasa en el pais. Hay mucho por subsanar, un dia café mediante te cuento algunas cosas que se sufren acá en la Capital también.
Adelante con este blog!